Ronaldinho ha roto su silencio tras salir de la cárcel. El exfutbolista brasileño del FC Barcelona, entre otros equipos, permaneció un mes en un penal de Paraguay y cumple arresto domiciliario en un hotel de lujo en el que dispone de un salón para jugar a fútbol.
Ronaldinho ha reconocido que vivió un calvario, en una entrevista a ABC Color, al permanecer en prisión, pese a que pudo disfrutar del fútbol como vía de escape. "Nunca me imaginé que me podía pasar algo así, fue un golpe muy duro".
El exdelantero explicó que llegó a Asunción por "el lanzamiento de un casino online y de un libro" y destacó que "todo lo que hacemos es en virtud de los contratos que gestiona mi hermano".
Es por ello que "nos quedamos absolutamente sorprendidos al saber que los documentos que teníamos no eran legales", lamentó, añadiendo que "a partir de ese momento nuestra intención fue siempre la de colaborar con la justicia para aclarar los hechos".
Ronaldinho admitió que los presos le recibieron "con amabilidad" y compartía el tiempo con ellos para "jugar al fútbol, firmar autógrafos, hacernos fotos... Eso es parte de mi vida. No tendría ningún motivo para dejar de hacerlo y mucho más con personas que está viviendo un momento complicado al igual que yo".
El carioca apuntó que "yo siempre tengo mi fe, siempre hago mis oraciones para que las cosas salgan bien y ojalá dentro de poco todo esto acabe. Toda mi vida he procurado llegar al más alto nivel profesional y llevar alegría a la gente con mi fútbol".